México cayó dramáticamente ante Japón por 6-5 en la semifinal del Clásico Mundial de Béisbol el lunes por la noche en el LoanDepot Park de Miami. Japón, que siempre ha estado en semifinales en la historia de la competencia y tiene dos campeonatos, anotó dos carreras en la novena baja para dejar tendido a México, la sorprensa del torneo.
De esta manera, Japón enfrentará a Estados Unidos en la gran final del torneo este martes también en Miami (4 p.m., FOX).
Por un momento parecía que México se enfrentaría a Estados Unidos en la final del martes, pues estaba ganando 5-4 en la novena entrada, sin embargo había sufrido mucho durante varias entradas.
En el inicio del fatídico noveno episodio y con México arriba por 5-4, un doblete de Shohei Ohtani puso la carrera del empate en base. Luego le dio base por bolas a Masataka Yoshida y dejó todo listo para que Munetaka Murakami, en el plato sin outs, tuviera la oportunidad de ganar para Japón. Fue entonces que en la parte baja de la novena, en un lanzamiento de 1-1, Murakami, que juega en las Golondrinas Yakult de Tokio de la liga Nippon Professional Baseball, conectó un doblete al centro del campo que permitió anotar a Ohtani, desde segunda, y a Ukyo Shuto, desde primera. Murakami, que se había ponchado tres veces en el juego, le dio de esta forma el triunfo al conjunto asiático.
Japón ha hecho honor a su fama de ser quizás el mejor equipo de béisbol del planeta, pues ha superado a sus oponentes por 39-8, pero sufrió para derrotar a un México que se fue arriba por 3-0 en la cuarta entrada y en la octava por 5-3. Sin embargo, a base de poner peloteros en base, remontó nuevamente para llevarse el triunfo en el último inning. Japón anotó seis carreras en los últimos tres innings.
Sobre el papel, el Japón-México parecía un duelo desigual pues la joven estrella Rōki Sasaki estaba en el montículo para los bicampeones. Sasaki había tenido más de tres innings sólidos hasta que Luis Urías lo sacudió un jonrón de tres carreras.
El Samurai Japan ha logrado un récord de 6-0, con Ohtani luciendo como la superestrella que es durante todo el torneo y Murakami destacando contra Italia en cuartos de final, y nuevamente en semifinales ante México.
México, que quemó a Julio Urías en la victoria del sábado sobre Puerto Rico en cuartos de final, tuvo a un gran pitcher en su inicialista Patrick Sandoval en el montículo. Sandoval, que juega con los Angels, aguantó 4 entradas y 1/3, permitiendo solamente cuatro hits sin carrera.
El cojunto dirigido por Benjamín Gil había desafiado los pronósticos en este Clásico Mundial. Tras perder ante Colombia en la prórroga del primer juego del torneo, el equipo cerró la fase de grupos con tres triunfos seguidos sobre Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá, y había derrotado a Puerto Rico en cuartos de final.
