Select your Top Menu from wp menus
31 de octubre de 2024 5:29 pm
DE: Confrontación

DE: Confrontación

Compartir

Por Alejandro Villegas…
Durante los más de cinco años de su mandato, el ciudadano presidente ha tenido como su principal critico al ciudadano Carlos Loret de Mola quien desde Latinus ha difundido información crítica.
Los temas que abordan tanto el ejercicio gubernamental tanto del ciudadano presidente como la de la 4T, como acciones de sus familiares, han tenido amplia difusión.
Y en su momento han obligado al ciudadano presidente a mantener una abierta confrontación con el ciudadano Carlos Loret de Mola, a quien también ha tratado de cuestionar de manera infructuosa.
Pero no es el único caso, el ciudadano presidente se ha confrontado, al aplicar lo que desde su punto de vista es su derecho de réplica con otros ciudadanos periodistas como Jorge Ramos, Joaquín López Dóriga, Ciro Gómez Leyva e incluso Carmen Aristegui, quien representa el caso más emblemático por el abierto e innegable apoyo que le brindó al hoy ciudadano presidente como candidato opositor.
En general, el ciudadano presidente no ha ejercido con puntualidad el derecho de réplica y ha ejercido desde su posición una abierta presión y descalificación del ejercicio periodístico, al descalificar y cuestionar sin más argumentos o prueba que su palabra los trabajos de investigación o crítica periodística que se han presentado en torno a él y sus allegados.
Lo que el ciudadano presidente ha hecho en el fondo es confrontarse con el ejercicio periodístico, cuestionando de manera frontal una acción que como opositor no sólo festejó, sino alentó y llegó a reconocer.
Lo evidente es que una cosa es estar en la oposición, desde donde se aprecian todas las fallas por mínimas que sean y otra muy diferentes estar en el ejercicio del poder, en donde es difícil mostrarse tolerante y en su caso ejercer con puntualidad el derecho de réplica, en lugar de acudir a la confrontación y la descalificación.
Desbandada
La gran desbandada comenzó en todas las esferas. Quienes desean contender en el próximo proceso electoral en el plano estatal aprovecharon al máximo el tiempo y ahora se aprestan a solicitar licencia o bien separarse de los cargos.
Los espacios comenzarán a llenarse a toda prisa, de ello no hay duda, lo malo es que quienes fueron electos para ejercer un cargo, hagan a un lado su compromiso para privilegiar sus proyectos personales.
Una conducta que no admite discriminación y alcanza históricamente a todos los partidos políticos.

Related posts