Por Alejandro Villegas..
La recompensa que anunció recientemente el gobierno estadounidense por varios líderes del narcotráfico que operan desde México, pone en evidencia lo poco que la 4T ha realizado en casi cuatro años en la materia.
Entre los involucrados están Rafael Caro Quintero y los hijos del Chapo Guzmán, quienes estuvieron en manos de la justicia mexicana y fueron puestos en libertad.
En particular, en el caso de uno de los hijos del Chapo Guzmán se recuerda el episodio en el que el ciudadano presidente ordenó, como lo reconoció personalmente, que fuera liberado para evitar una masacre.
Un hecho que marcará su gestión, sin duda, por lo complicado del caso.
Pero en realidad, lo cierto es que si bien durante la gestión del ciudadano presidente se ha aprehendido a algunos integrantes de mediano peso, de grupos criminales no se ha capturado a los líderes y mucho menos se han desmantelado esas organizaciones criminales.
El trasiego de drogas se mantiene al igual que la sustracción de gas y combustibles, en lo que se traduce en un claro pendiente nacional.
Han pasado casi cuatro años desde el inicio de la 4T y los resultados en la materia son ralos. De otra forma, la administración Biden lejos de ofrecer recompensas, haría un reconocimiento a la labor realizada.
Pero como siempre, el ciudadano presidente tiene otros datos, por supuesto gratos a su oído.
Solidaridad
Algunos mandatarios del área han expresado su respaldo a la propuesta del ciudadano presidente de que todos los dignatarios de la región sean convocados a la novena Cumbre de las Américas.
Sin embargo, la posibilidad de que el gobierno estadounidense como anfitrión modifique su posición es mínima.
