Por Alejandro Villegas…
La realización de la Consulta de Revocación de Mandato, está en veremos y presenta complicaciones que sin duda deben captar la atención del ciudadano presidente, al menos por tres factores.
En primer lugar, la rala respuesta del pueblo bueno a la solicitud de respaldar con sus firmas la realización del ejercicio de participación ciudadana, que de no reunir el apoyo del tres por ciento de la lista nominal de electores no se realizará.
En segundo lugar, el revés propinado en primera instancia por los consejeros electorales del INE y posteriormente confirmado por el TEPJF, a Morena, por su insistencia en promover la consulta como un ejercicio de ratificación y no revocación de mandato del ciudadano presidente.
En esencia, el centro del debate sobre el tema radica en el hecho de que la norma establece el concepto de revocación de mandato y no de ratificación, por lo que la autoridad electoral ordenó a Morena, recomponer la situación y corregir la propaganda que realiza.
En tercer sitio, la petición de la secretaria general de Morena, la ciudadana Citlalli Hernández, a dirigentes de Redes Sociales Progresistas del apoyo para la reunir el apoyo social necesario para la realización de la Consulta de Revocación de Mandato. Lo que se lee como una acción de desesperación que deja mal parado al instituto político fundado por el ciudadano Andrés Manuel López Obrador, en el plano de la capacidad de convocatoria y exhibición del músculo social.
Estos elementos, sin duda, deben captar la atención del ciudadano Mario Delgado, pero sobretodo del ciudadano presidente, para recapacitar sobre la conveniencia de insistir en la promoción de una consulta que, al parecer, sólo muy pocos como ellos, consideran necesaria.
Porque, en realidad, todo indica que al pueblo bueno, esa posibilidad le es indiferente.
Y ya entrados en gastos, por aquello de la austeridad, sin duda los recursos que se ahorren bien podrían dedicarse a acciones más productivas para el bienestar social.
Migrantes
La llegada de la temporada decembrina contribuirá a que se reduzca la atención que se presta en los planos social y político al fenómeno migratorio y al programa Quédate en México, pero sin duda, cuando termine el afamado puente Lupe Reyes, parafraseando al célebre Tito Monterroso: Cuando despertó, la migración todavía estará allí.
