Por Alejandro Villegas…
El ciudadano presidente, fiel a su estilo, desde ahora tilda de traidores a la patria a los legisladores que no voten a favor de su reforma energética. Y con ello privilegia la línea de la división y el chantaje por encima del diálogo.
El mensaje a todas luces además de inadecuado, coloca al ciudadano presidente en una posición radical, desde donde aprecia con claridad que todo aquel que no está con él esta en su contra y por lo tanto es un enemigo de la patria.
Así envuelto en la bandera de un nacionalismo radical pretende someter a su voluntad a los legisladores de oposición y ganar el respaldo del pueblo bueno.
En paralelo, asevera que su administración no otorgará ninguna concesión para la explotación del litio, a particulares, en una acción equiparable a un decreto de nacionalización, independientemente de la voluntad del Legislativo.
Y con ello, compromete una inversión considerable para que el estado mexicano se enfoque a la explotación del litio, que de entrada se aprecia como una acción monopólica, que sin duda provocará una acción por parte del sector privado.
De esta manera, el ciudadano presidente proyecta su pretensión de ser poseedor de la verdad absoluta y ejercer un gobierno en donde todo acontecimiento se ajuste a su voluntad, sin oposición alguna, como en los mejores tiempos del priismo.
Universidades
El ciudadano presidente reprochó que los alumnos de educación superior no hayan retomado por completo las clases presenciales, e instó a las universidades a hacerlo en el corto plazo.
Sin duda, directivos y rectores de las universidades y escuelas de educación superior tienen argumentos para mantener la educación a distancia, pero el ciudadano presidente mantiene su fijación por un retorno generalizado a las actividades previas a la pandemia, para así exhibir un triunfo que en los hechos aún se antoja lejano sobre la COVID-19, sobretodo si se considera que para que la totalidad de la población sea vacunada aún hay un largo trecho por cubrir.
Y la declaratoria por parte de los organismos internacionales, como la OMS, de que la pandemia ha sido superada, simple y sencillamente no aparece en el horizonte.
