Por Alejandro Villegas…
La presencia de Miguel Díaz-Canel como invitado especial a la conmemoración del CCXI aniversario del inicio de gesta independentista de México, se quiera o no se traduce en un abierto desafío a la administración Biden.
Que se confirma con la expresión por parte del ciudadano presidente, en el sentido de que la isla debe ser considerada como la nueva Numancia por su ejemplo de resistencia.
En el plano de las relaciones con Estados Unidos, por más apertura que se pueda apreciar con la administración Biden, a partir de la histórica diferencia de los gobiernos estadounidenses con Cuba y sus gobiernos, los intereses de México pueden resultar afectados.
Ciertamente, durante décadas México y otros países se han pronunciado por el fin del bloqueo económico a la isla, al tiempo que el gobierno estadounidense ha abierto su territorio a los refugiados. Sin obtener resultados positivos.
La presencia de Díaz-Canel, permite recordar el episodio que protagonizó Vicente Fox con Fidel Castro cuando se hizo célebre la expresión “comes y te vas”, en abril de 2002, en el marco la Cumbre Extraordinaria de Las Américas en la ciudad de Monterrey, para evitar el enfado de la administración de George W. Bush.
La visita del mandatario cubano, puede tener consecuencias, sobretodo cuando el ciudadano presidente está a la espera de que su homólogo estadounidense acepte realizar una visita oficial al país, y cuando aún está reciente la realización del diálogo de alto nivel, así como la visita de la Vicepresidenta Kamala Harris.
El ciudadano presidente calcula que su capital político le alcanza para mantener una relación abierta y hasta cierto punto complaciente con Díaz-Canel, y a su vez coquetear con la administración Biden, pero se puede equivocar.
Y, obviamente, las consecuencias si bien no pueden ser drásticas se apreciarán tanto en el plano económico, como en el diplomático.
De entrada, la moneda está en el aire, y la reacción estadounidense no se hará esperar.
Campeche
Layda Sansores asumió la gubernatura de Campeche y se convirtió en la primera mujer en ocupar la titularidad del Ejecutivo en esa entidad.
Sin duda se trata de un triunfo significativo, que será enarbolado de manera particular, por la 4T.
Pero fundamentalmente se aprecia como una derrota para el dirigente nacional del PRI y ex gobernador de esa entidad, Alejandro Moreno.
