DE: Extorsión

Por Alejandro Villegas….
La presentación de una nueva estrategia para combatir la extorsión, es bien recibida; sin embargo, también se presta a todo tipo de suspicacias. En principio por lo que hace a los penales.
Evidentemente, todo hace suponer que, si se busca inhibir las comunicaciones en los centros de reclusión, es porque se tiene detectado que desde esos puntos se opera.
Por supuesto, que a ello se liga la existencia de un obligado contubernio que deriva en corrupción.
Sin embargo, un elemento que no puede menospreciarse es el de la salvaguarda y secrecía de la información de las personas tanto en poder de particulares como de las autoridades.
Los datos sobre sus propiedades e ingresos, así como datos sensibles están expuestos a ser sustraídos y utilizados, para realizar actos de extorsión.
Sin duda, grupos del crimen organizado están detrás de las acciones de extorsión, que tienen en la modalidad de cobro de piso una de sus expresiones más visibles, y su combate requiere de verdaderas acciones de fondo que pueden ir más allá de las enunciadas por el ciudadano secretario Omar García Harfuch.
Incluso se habla del congelamiento de cuentas, como si quienes ejercen el cobro de piso lo hicieran mediante cuentas bancarias, como los extorsionadores menores que centran su acción en personas y familias.
En esencia los ejes de la estrategia parecen lógicos y obligados, pero a simple vista no hay nada nuevo.
No obstante, lo deseable es que en el corto plazo se brinden resultados concretos, en caso contrario, se tratará de un esfuerzo más que sólo despertó expectativas.
Ganado
Estados Unidos permite de nueva cuenta el ingreso de ganado que había frenado por la presencia del gusano barrenador, pero lo hace con normas y flujo que deberán respetarse.
Un episodio que puede venderse como un avance para México y hasta un logro significativo, pero de nueva cuenta se confirma de que lado de la balanza se toman las decisiones y se imponen normas.