Select your Top Menu from wp menus
19 de mayo de 2024 8:24 pm
DE: Piso

DE: Piso

Compartir

Por Alejandro Villegas…
El definitiva el ciudadano presidente perdió el piso de la legalidad y el respeto a las normas, además de que trata de darle la vuelta el tema y victimizarse, como siempre en espera del apapacho del pueblo bueno.
Ante la determinación de You Tube de bajar el contenido de su conferencia del jueves 22 de febrero, en la que de manera indebida difundió el número telefónica de una periodista, mantiene su postura y asegura que no importa que la bajen por que la volverá a subir.
Acusa que la red social en México está en manos de los conservadores, y trata de instruir a los propietarios para que tomen cartas en el asunto, en lo que representa una acción poco clara ya que al tomar parte en la comunidad acepto ceñirse a las normas que la rigen, y sin importar su cargo o posición social o política debe respetarlas.
Al tiempo que en una expresión por demás desproporcionada asegura que la periodista es una figura pública y por tanto se puede dar a conocer su número telefónico.
Sin embargo, durante años como el principal personaje público del país no ha hecho público su número telefónico ni el de los integrantes de su gabinete.
Por lo que hace a la victimización se queja airadamente, aunque sin rasgarse de más las vestiduras por la difusión del número telefónico de su hijo.
Esto con el evidente propósito de victimizarse y desviar la atención, tras el grave error que cometió y que se niega a aceptar pese a que ha sido ampliamente criticado, para el ciudadano presidente su moral y normas están por encima de cualquier ley, lo que evidentemente es contrario al juramento que rindió al protestar el cargo.
Mensajes
La ciudadana Xóchitl Gálvez exhibió los mensajes de odio y descalificación que recibe, de nueva cuenta, tras la difusión de su número telefónico personal.
Las expresiones son solo una muestra de la forma en la que operan los radicales que están dispuestos a todo con tal de amedrentarla y frenar su campaña.
Es claro quien o quienes los alientan y de dónde vienen los mensajes, la ciudadanía no es tonta y toma sus propias decisiones.

Related posts