En México las acciones y políticas públicas para revertir el cambio climático están en segundo término, con un presupuesto decadente y políticas que favorecen la destrucción desde el propio Ejecutivo Federal, denunciaron la diputada Edna Gisell Díaz Acevedo y el diputado Alan Eduardo Rodríguez Gómez, del Grupo Parlamentario del PRD.
Esto, dijeron en un comunicado, “mientras las principales ciudades del mundo se enfocan en acciones y políticas públicas que reviertan o controlen los impactos del cambio climático”.
Durante la comparecencia de la titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), María Luisa Albores González, con motivo del análisis del Quinto Informe de Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, Díaz Acevedo reiteró que en “cinco años se aprecia con preocupación que el futuro ambiental de México ha sido sacrificado, entregando resultados que no nos favorecen”.
Por lo que advirtió que el PRD evidenciará que “no es prioridad la agenda climática y el tema ambiental para esta devastadora administración.
“Se presenta una agenda ambiental, pero el ramo sufre la languidez de recursos. Se destina más a supuestas acciones de mitigación y adaptación al cambio climático para la Sedena que para la Semarnat”, señaló la también presidenta de la Comisión de Cambio Climático y Sostenibilidad.
“Esto traerá a nuestra memoria, en las próximas crisis, a un gobierno que ha sido omiso en cumplir con sus obligaciones y claudicó en su principal obligación de fomentar la justicia ambiental. Seguimos dañando nuestra casa en común y eso no lo puede tapar ningún discurso, porque la realidad nos sigue rebasando”, insistió
La diputada por Michoacán afirmó que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, a través de la Semarnat, ha violado todas las normativas habidas y por haber en materia de medio ambiente, con tal de ejecutar la obra ecocida denominada Tren Maya.
“No podemos omitir hablar en este gobierno de las mega obras que han desatado controversias en torno a la devastación del entorno, haciendo, por supuesto, a Semarnat cómplice por omisión en todo el proceso de planeación y de construcción. El propio informe de la Secretaría da cuenta de ello”, precisó.
Díaz Acevedo expuso que, en un apartado, la dependencia describe como parte de sus actividades la participación en dos proyectos prioritarios: el Tren Maya y la Refinería de Dos Bocas”.
En su oportunidad, el diputado Alan Rodríguez Gómez recriminó que la Semarnat sólo se ha encargado de aprobar las ocurrencias del Ejecutivo Federal, sin tomar en cuenta las graves afectaciones ambientales y sociales.
“El Tren Maya, así como los proyectos emblema de este sexenio, han reflejado la violación en la normatividad ambiental, ya que se han puesto por encima de la Ley los acuerdos presidenciales”, apuntó
Recordó que la construcción inició sin contar con las manifestaciones de impacto ambiental; además, generó graves afectaciones por los cambios de ruta, deforestación, desalojo de indígenas y pérdida de la biodiversidad.
Lamentó que diversas organizaciones ambientalistas, como Cenotes Urbanos, Greenpeace y Sélvame del Tren, hayan sido tachadas como “grupos conservadores” por alertar que el suelo de la región se colapsará bajo el peso del tren, porque el lugar está lleno de cenotes, huecos y compuestos de caliza blanda.
Lo anterior, expuso debido a que la velocidad que alcanzará el Tren Maya se prevé sea de 120 a 160 kilómetros por hora.
“También está la amenaza de que el diésel contamine el agua limpia que abastece a más de 1,8 millones de habitantes de Quintana Roo y la mayor reserva de agua dulce de México, en una región que ya enfrenta graves sequías”, finalizó.
