DE: Sueños

Por Alejandro Villegas…
Los estrategas de Morena insisten en utilizar subterfugios verbales para tratar de engañar al arbitro electoral. Y lo hacen incluso en mensajes que se difunden en tiempos oficiales.
Los sueños de la ciudadana Claudia Sheinbaum se traducen en simples y llanas promesas electorales.
El contexto del mensaje es más que claro y ello representa una prueba para el árbitro electoral.
Si no hay amonestación alguna seguirán por esa senda, como el recoveco legal que necesitan para plantear promesas de campaña con expresiones diferentes.
En el fondo Morena no cambia y sus estrategas menos. Siempre prefieren avanzar al margen de la ley, utilizando toda suerte de subterfugios entre ellos predominantemente el de llamar a las cosas con otro nombre.
Hay que reconocerle que al momento les ha funcionado, pero ya es hora de que la autoridad electoral de muestras de que no se le puede engañar.
No es poco lo que está en juego. En principio candidatos y estrategas deben comprender que la autoridad electoral no puede ser objeto de engaños verbales, y menos con esquemas tan evidentes.
La ultima palabra la tiene la autoridad y solo ella.
Terna
La sensatez se impuso y el Senado le regresa la primera terma al ciudadano presidente.
Si quiere utilizar la via larga, por la oposición no hay problema.
Todo indica que se optó porque designe a quien quiera pero sin violar las normas para que quede constancia de que su elegida no cuenta con el respaldo del Senado.
Venga la segunda terna que será rechazada, para que el ciudadano presidente pueda designar de manera directa a quien le plazca.