El presidente Andrés Manuel López Obrador se quedo varado por más de una hora a bordo del Tren Maya a la altura del municipio de Yaxcabá, en Yucatán, durante su segundo día de pruebas, lo que provocó un retraso de más de dos horas en la agenda del mandatario.
El titular del ejecutivo se encontraba realizando pruebas a bordo del convoy en el tramo de Mérida a Chichén Itzá cuando el tren detuvo su marcha por al menos una hora y 15 minutos.
En la cabina del Tren viajaban a bordo Maite Ramos Gómez, directora de Alstom México, empresa constructora del tren, un militar y el empresario Daniel Chávez.
Al cuestionar al personal sobre el desperfecto, un militar contestó que se trataba de “pruebas” y enseguida cerró la puerta del tren.
La máquina de cuatro carros se detuvo aproximadamente a las 14:45 horas antes de llegar al puente Yaxcabá, Yucatán, el cual, estaba personal de la Secretaría del Bienestar, Fonatur, de la Guardia Nacional y de la Secretaria de la Defensa Nacional (Sedena).
De acuerdo a la agenda pública del presidente López Obrador, a las 15:30 horas encabezaría el acto Recuperación de la memoria y la grandeza de la civilización maya, en el sitio arqueológico Chichén Itzá.
También encabezará exposición de 50 piezas arqueológicas rescatadas como resultado de las excavaciones del tren maya y la Inauguración del Zona Arqueológica de Chichén Itzá Viejo. Chichén, Tinum, Yucatán.
Diego Prieto Hernández, director general del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), justificó el lento paso del Tren Maya en su periodo de prueba ya que se está verificando su funcionamiento.
Por ello, se disculpó porque inició con tres horas de retraso el acto de “Recuperación de la memoria y la grandeza de la civilización maya, en el sitio arqueológico Chichén Itzá” que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El acto estaba programado a las 15:30 horas, pero inició a las 18:30 horas.
