DE: Insabi

Por Alejandro Villegas…
El ala legislativa de Morena sacó a toda prisa acciones que consideran necesarias, para ellos y por supuesto indispensables para el ciudadano presidente. En ese plano la agenda social no existe.
Entre lo más destacado resalta a desaparición del Insabi y la determinación de que sus funciones sean absorbidas por el IMSS-Bienestar.
Las reformas a la Ley General de Salud dejan en claro que el Instituto de Salud para el Bienestar nació muerto y no funcionó.
Y al no operar de manera adecuada, se tuvo que implementar desde hace un año el programa IMSS-Bienestar que a la fecha opera en 19 estados del país, mediante convenios.
Sin embargo, con la modificación a la Ley General de Salud, la adhesión dejará de ser voluntaria, para que en automático el programa IMSS-Bienestar cuente con presencia a nivel nacional y en consecuencia la adhesión de los gobiernos estatales sea automática.
Lo evidente en este caso es que el pueblo bueno, en quien se supone está centrado el programa que busca brindarles acceso a los servicios de salud es el que no termina de asimilar el proceso al que se debe sujetar.
No bien empezaba a asimilarse la forma en que operaba el Insabi cuando surgió el IMSS-Bienestar y ambos comenzaron a coexistir en lo que se convirtió en una desaparición anticipada del Insabi que ahora está por concretarse, con el aval del Senado y por supuesto la obligada publicación de la reforma por parte del Ejecutivo.
Eso si el ala legislativa de Morena, la 4T y el ciudadano presidente de ninguna forma aceptan el fracaso del Insabi.
Salud
El informe del ciudadano secretario de Salud sobre la condición del ciudadano presidente fue tan somero como innecesario.
Todo indica que no hubo ni habrá disposición para dar mayores informes a la ciudadanía sobre el estado de salud del ciudadano presidente.
La información brindada fue tan escueta que en realidad no reflejó nada. En cambio, la forma en que la ciudadana esposa del ciudadano presidente Beatriz Gutiérrez Müller planteó el panorama resultó más realista y convincente.
Lo que es evidente es que la recuperación que en principio se estimó en tres o cuatro días, llevará más tiempo.