Por Alejandro Villegas…
La aprobación de la iniciativa para que las fuerzas armadas permanezcan en la calle, desarrollando labores de seguridad pública, tendrá muchas consecuencias.
Ante todo provocará una grave división en el priismo que terminará con la salida de la presidencia nacional del ciudadano Alejandro Moreno.
En segundo plano, como se anticipó fracturará la fortaleza de la coalición Va por México que a pesar de que pueda subsistir en términos nominales siempre cargará con el fantasma de la desconfianza.
Y de paso ampliará las posibilidades de triunfo de los candidatos de Morena a las gubernaturas de Coahuila y el Estado de México.
Pero lo más importante es que fortalecerá la imagen del ciudadano presidente que de entrada ya ganó con la sola presentación de la iniciativa priista.
Desde su pulpito, el inquilino de Palacio Nacional podrá alzar los brazos en señal de triunfo sobre una oposición disminuida y dividida.
Y con ello habrá evitado la conformación de una gran coalición opositora similar a que siempre soñó conformar en su larga etapa como opositor a los gobiernos priistas y panistas.
Embajadas
El ciudadano presidente tiene más que definido el destino de los ex gobernadores de oposición.
Los quiere mantener alejados del país, pero bajo el escrutinio de su administración, en lo que más de uno apreciará como docilidad y sumisión.
