El presidente López Obrador deja atrás sus diferencias con el sector privado y lo suma en un llamado de urgencia para tratar de frenar la inflación en los productos de la canasta básica.
A través del Secretario de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Ramírez de la O, presentó el Programa de Combate a la Inflación y a la Carestía (PACIC), el cual se aplicará por 6 meses, y establece medidas que garantizan mantener el subsidio en gasolinas y electricidad; el aumento en la producción de granos, la expansión en la entrega de fertilizantes y la eliminación de cuotas por el sulfato de amonio.
En materia de distribución, fortalecerá la seguridad en carreteras, no habrá aumento en los peajes ni en las tarifas ferroviarias y marítimas, además de agilizar sus servicios.
Para el comercio exterior, destacó aranceles cero a la importación para básicos e insumos. En otras medidas, explicó que se realizará una reserva estratégica de maíz, habrá precios de garantía en los principales granos y se fortalecerán los programas de abasto Diconsa y Liconsa.
Por su parte, empresarios de Walmart, Grupo Bimbo, Telcel y Telmex, así como el Consejo Coordinador Empresarial, dijeron que se suman al llamado de gobierno en una acción a favor de los que menos tienen. En una carta dirigida al presidente, Carlos Slim anunció que en este año no habrá aumento en ninguno de sus servicios de telefonía e internet.
Agradeció a todas las y los empresarios, haciendo referencia a los atuneros, a Francisco Cervantes, del CCE, a Antonio Valle, titular del Consejo Mexicano de Negocios, “no puedo mencionar a todos”, por sumarse a este plan y dejó en claro que no hubo ningún tipo de presión para que aceptaran.
