La Cámara de Diputados, en su Primer Periodo Extraordinario de Sesiones aprobó por 319 votos a favor y 53 en contra la ratificación del nombramiento que el titular del Ejecutivo federal hizo a favor de Rogelio Eduardo Ramírez de la O, como secretario de Hacienda y Crédito Público.
Durante su comparecencia ante la Comisión de Hacienda y Crédito Público de la Cámara de Diputados, Ramírez de la O reveló que para aceptar el cargo pidió poder a fin de intervenir en la política de Pemex y la CFE. A pregunta del diputado Antonio Ortega, PRD, el nuevo titular de Hacienda indicó que se negó a ser un “florero”.
Al fundamentar el dictamen de la Comisión de Hacienda y Crédito Público, su presidenta, la diputada Patricia Terrazas Baca (PAN), precisó que la ratificación se da en el contexto de los cambios realizados en fecha reciente por el titular del Ejecutivo en su gabinete.
En la Comisión de Hacienda, precisó, se analizó el expediente de Rogelio Eduardo Ramírez de la O, del cual se desprendió que cuenta con experiencia para desempeñar el puesto de titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Indicó que desde la Cámara de Diputados se es congruente en el manejo responsable de la economía, ya que es primordial para México y no siga cayendo en el bache provocado por la pandemia del COVID-19, “bache que cada día se va pareciendo más a un socavón”.
Este, dijo, es el tercer nombramiento de un secretario de Hacienda y Crédito Público que se da en el primer trienio del Gobierno; es decir, un secretario por año. “Es una situación un poco usual”.
Terrazas Baca mencionó que a un mes de la entrega del Paquete Económico para el próximo año, es primordial dar certidumbre a su proceso de análisis y aprobación, porque los retos que México tiene que enfrentar son muy fuertes.
Ante ello, añadió, es primordial que el nuevo secretario se comprometa “porque el pueblo demanda un manejo responsable de los temas económicos de México”.
El próximo año no habrá nuevos impuestos: Ramírez de la O
Al hablar ante las y los diputados, Rogelio Eduardo Ramírez de la O indicó que busca consolidar la transformación del proyecto económico que el país decidió en diciembre de 2018, manteniendo los principales pilares: vocación social del Estado, estabilidad macroeconómica, austeridad republicana, desarrollo productivo nacional, apoyo al sector energético nacional, impulso a la inversión, potenciación de la Banca de Desarrollo y proyectos de desarrollo regionales.
Informó que en breve presentará un tercer paquete de inversiones que contendrá importantes desarrollos de infraestructura y energía, además “que el Presidente se encuentra firme en no crear impuestos ni aumentarlos, o esconderlos a través de sistemas complejos o poco transparentes”.
Adelantó que el Paquete Económico se presentará el próximo 8 de septiembre, el cual será equilibrado y responsable, con una profunda dimensión social, buscando el desarrollo social incluyente, dotando de mayores oportunidades a los más desfavorecidos y buscando una prosperidad nacional y convergente entre estratos sociales y regiones.
El compromiso del Gobierno y de la Secretaría de Hacienda, dijo, será propiciar un buen clima económico, confianza con los empresarios e inversionistas, condiciones de competencia, macroeconómicas, fiscales y regulatorias y de gobernabilidad para estimular la mayor inversión.
Aseguró que en materia de empleo se han recuperado al mes de julio el 95 por ciento de las posiciones perdidas durante la pandemia, es decir 12.3 millones de empleos.
Destacó que la inversión fija bruta aumentó 49 por ciento desde el mínimo presentado en mayo de 2020, además de que al primer trimestre de 2021 la inversión extranjera directa fue de 11 mil 900 millones de dólares, el mayor monto desde 1999. “El ritmo de recuperación ha contribuido a que la SHCP estime un crecimiento del PIB para 2021 del 6 por ciento en términos reales”, subrayó.
Explicó que en México el Producto se contrajo en 8.3 por ciento durante 2020, de acuerdo con el INEGI, y para enfrentarlo el Gobierno se enfocó en el uso más eficiente de los recursos públicos para absorber el costo en el sistema de salud sin vernos forzados a utilizar más endeudamiento o incrementar los impuestos.
Precisó que el año pasado los ingresos tributarios aumentaron 0.8 por ciento a pesar de que el Producto cayó 8.3 por ciento, resultado al combate a la elusión y evasión fiscal.
Expresó que el principal detonador de la recuperación económica es la implementación de la Estrategia Nacional de Vacunación que permite una reapertura de la capacidad instalada en la economía. A partir de finales de 2020 el Gobierno aseguró contratos de vacunas suficientes para toda la población. Desde el 24 de diciembre al día de hoy se han recibido 86 millones de dosis, de las cuales se han aplicado 67 millones.
“Espero que esta sesión inaugure una nueva etapa de intercambios abiertos, fructíferos y democráticos entre el Congreso y la Secretaría de Hacienda, en aras de seguir consolidando la transformación del país, la cual parte de la base de que se debe mantener la estabilidad macroeconómica, impulsar el crecimiento y el desarrollo económico, esto último enfatizando el bienestar de toda la población”, manifestó.
Puntualizó que la política de austeridad y la eliminación de gastos superfluos han hecho más eficiente y focalizado el gasto público, tanto en inversión pública como en gasto social destinada a proteger a la población con menores recursos, además de que el combate a la evasión ha fortalecido los ingresos sin necesidad de incrementar los impuestos.
“En los últimos tres años no se han rebasado los techos de endeudamiento aprobados por el Congreso, la cual será la línea política que continuará los próximos tres años. Uno de los objetivos prioritarios del proyecto económico del Ejecutivo es encausar los recursos públicos con un enfoque inclusivo en beneficio de los grupos más desfavorecidos”.
