Por Alejandro Villegas…
El ciudadano subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell mimetizó los argumentos distractores y de defensa del ciudadano presidente para adaptarlo a su entorno, en una acción perniciosa que aprecia golpismo en la defensa de los padres de niñas y niños enfermos de cáncer que denuncian la carencia de medicamentos.
Las acusaciones presentadas sin más respaldo que la palabra del ciudadano subsecretario de salud, amén de denostar la inteligencia de la colectividad, ponen de manifiesto la posible adopción de una estructura de defensa verbal por parte de los funcionarios de la 4T que enfrenten situaciones complicadas en su desempeño.
Las descalificaciones y críticas a los dichos del ciudadano subsecretario encontraron pronta respuesta en voces de políticos, pero sobretodo de madres y padres de familia afectados por el desabasto de medicamentos que se quiera o no es un hecho consumado.
De poco sirve el reconocimiento del ciudadano presidente al derecho de los padres y madres a su manifestación y demanda de medicamentos para sus hijos, así como el reproche e insistencia en encontrar culpables, en donde no los hay.
De nueva cuenta el ciudadano presidente recuerda el compromiso de pronta solución y descontento incluso de empresarios del sector y medios de comunicación, lo que debe entenderse como un elemento más de distracción, que busca el aplaudo y respaldo del respetable, pero que en nada contribuye a aliviar e malestar de las niñas y niños que padecen cáncer.
Hay que apuntar que no se trata de un escenario novedoso, sino de una falla que ha persistido por años, a lo largo de la gestión de la 4T y que pese a las promesas y compromisos asumidos por el ciudadano presidente no se ha podido superar.
Michoacán
El ciudadano presidente se niega a recibir al gobernador de Michoacán, como lo ha hecho con otros mandatarios estatales.
Sin embargo hay que reconocer que actúa correctamente al negarse a conocer información relacionada con la presunción de un posible ilícito, pero lo deseable sería que hubiera hecho lo mismo con otros casos como el caso Lozoya, o el del gobernador de Tamaulipas.
Se debe aplicar el mismo rasero en todos casos, y no actuar de manera diferenciada.
Pero así es el ciudadano presidente quien lo mismo dice una cosa que otra.
