Select your Top Menu from wp menus
8 de diciembre de 2025 11:10 am
¿Qué significa el desapego?

¿Qué significa el desapego?

Ximena Lobato…

“La raíz de todo el sufrimiento es el apego”. -Buddha

El otro día estaba platicando con una persona cercana. Me estaba contando sus problemas pero no se veía afectada, al contrario. Parecía ser muy objetiva y racional. Cuando le pregunté cómo se sentía me contestó: “Yo estoy súper tranquila. Esto no me afecta, porque no tengo apegos”.

Aaaaaah, la palabra con “A”. Uno de esos conceptos que se ha puesto de moda, y que pareciera que podemos usar para escaparnos del sufrimiento. Después de todo, hasta Buddha lo dijo, ¿no?

Esta versión popular del apego se entiende como un vínculo excesivo hacia algo material. Nos imaginamos al rey del cuento apegado tan fuertemente a su oro que acaba por perder a su familia, o al primo de un amigo, que estaba aferrado a su novia de manera enfermiza.

Y entonces concluimos que el secreto para no sufrir es ser indiferente, no sentir nada. Ya sabes, “Mi hermana está en el hospital, pero así es la vida. No me gusta apegarme a otras personas”. O “Me voy a mudar de la casa en la que llevo viviendo 25 años, pero cero estoy triste. Yo no me apego a las cosas materiales”.

Esto no es el desapego al que se refería Buddha. Esto es un bypass espiritual (o sea, dizque usar principios universales para evitar situaciones que te estén confrontando. Te dejo aquí un post donde lo explico mejor: https://ximenalobato.substack.com/p/el-bypass-espiritual ).

No se trata de no sentir feo, se trata de no sufrir.

¿Cuál es la diferencia? Sentir feo es tener una reacción humana y natural ante circunstancias que nos duelen: pérdidas, cambios, ciclos que terminan. Sufrir es poner encima de esta vivencia una historia que inventamos y que nos atormenta. Esta historia es completamente innecesaria, pero hace que nos sintamos mil veces peor.

A lo que se refería Buddha es a esto: el verdadero sufrimiento no proviene del apego a lo material (objetos o personas), sino el apego a tus propios pensamientos acerca de ellos. Soltar tus creencias se siente casi casi como una traición a un ser querido. Ni siquiera te atreves a pensar que podrías separarte de ellas.

¿Con cuáles paradigmas estás tan encariñada que te resistes absolutamente a dejarlos ir? A lo mejor uno de estos ejemplos te suena:

  • Creer que a estas alturas de tu vida ya deberías estar ganando X cantidad de dinero.
  • Pensar que en este mundo cada quién se tiene que rascar con sus propias uñas, o que pedir ayuda es señal de debilidad.
  • Creer que te tienes que encargar de absolutamente todo porque, si tú no lo haces, nadie lo va a hacer (o por lo menos no tan bien como lo harías tú).
  • Pensar que tus únicas opciones de vida son X persona o X trabajo.
  • Creer que nunca vas a poder perdonar algo que te hicieron.
  • Pensar que preocuparte por todo lo que puede salir mal hace que lo puedas evitar.

Hay infinidad de creencias. Tenemos nuestra propia lista personal, pero el apego es el mismo. El fin del sufrimiento que dice Buddha, entonces, está en desapegarte de lo que piensas, en considerar que hay otras formas de pensar, que la tuya podría estar equivocada, o en su defecto que podría no estar funcionando en esta situación.

Hoy te propongo que practiques desapegarte tantito de alguna creencia que hayas tenido por años, y que te haga sufrir. Seguramente te va a costar mucho trabajo siquiera considerar la posibilidad de que no tengas razón. (Pregúntame cómo lo sé…) De todos modos inténtalo. Y mañana lo vuelves a intentar. Te vas a dar cuenta de que esa creencia se va aflojando, algo así como un diente cuando se va a caer, que al principio se mueve muy poquito pero al estarlo empujando con la lengua (¿verdad que tú también lo hacías?) va teniendo más juego hasta que un día simplemente se zafa.

Encaríñate todo lo que quieras con personas, lugares o cosas. Pero no dejes que tu mente se apegue a sus creencias acerca de ellos.

Related posts