DE: Investigación

Por Alejandro Villegas…
El ciudadano presidente anuncio que conducirá personalmente la investigación del caso Ayotzinapa, pero con su declaración de que el Ejército ha entregado toda la documentación, cerró el paso a la principal demanda al momento por parte de los padres de los normalistas desaparecidos.
En principio, hay que establecer que el hecho de que el ciudadano presidente argumente que conducirá personalmente la investigaciones no se traduce en una garantía de satisfacción por parte de quienes demandan justicia y el esclarecimiento de los hechos.
Además de que en realidad es más que dudosa la experiencia que el ciudadano presidente pueda tener en materia de conducción de una investigación.
Resulta evidente apreciar que lo que busca el ciudadano presidente es que su conducción personal se aprecie como una garantía de que la versión que se presente, que difícilmente variará a estas alturas, es verídica.
Una especie de apuesta que le permitirá medir en el fondo el nivel de confianza y credibilidad con que cuenta, pero olvida que los padres y familiares de los normalistas desaparecidos tienen demandas específicas.
A fin de cuentas, es claro que el caso de los normalistas de Ayotzinapa, por lo que hace a sus padres y familiares, quedará inconcluso y con ello el ciudadano presidente habrá faltado a uno de sus compromisos.
En tanto que con el aval del ciudadano presidente como conductor directo de la investigación, se dará por cerrado y se dirá que el compromiso se cumplió.
Israel
Lo que en principio se manejó como una mexicana atrapada en Israel creció a alrededor de mil.
Es más que apreciable que desde el principio la 4T no habló con claridad sobre el número de mexicanos que estaban ya sea como turistas o residentes temporales en Israel, y poco a poco ha tenido que dejar fluir la información.
Ahora los connacionales ya no serán trasladados a México, se establecerá un puente aéreo para trasladarlos a Madrid, España, para que desde ahí más de 700 incluidos por supuesto menores de edad, se trasladen por sus medios al destino que quieran.
Se dirá que les salvaron la vida y apoyaron, pero lo que queda en evidencia es que no se proyectó la dimensión del número de mexicanas y mexicanos en Israel, desde que comenzó el conflicto.