La Comisión Especial de Seguimiento a la Implementación del T-MEC (CESITMEC) del Senado, estimó que la solicitud de consultas de Estados Unidos y Canadá, es una oportunidad para refrendar la buena disposición que México siempre muestra de escuchar y dialogar con sus socios estratégicos, mientras cuida que prevalezca el interés nacional.
En un comunicado, la comisión que preside la priísta Claudia Ruiz Massieu, reconoció que la relación económica que México, Estados Unidos y Canadá han sostenido gracias al T-MEC, los ha ayudado a posicionar y mantener a América del Norte como una de las regiones productivas más importantes y competitivas del mundo.
Al mismo tiempo que permite que cada país desarrolle su bienestar económico y social a través de los vínculos comerciales que los unen, respetando en todo momento cada soberanía.
Así, en caso de divergencias sobre la interpretación y aplicación de las disposiciones del T-MEC, y para evitar que estas pongan en riesgo las relaciones diplomáticas entre los países socios, el tratado cuenta con herramientas que permiten revisar las posibles controversias y llegar a acuerdos que satisfagan a las partes involucradas.
Este es el caso del mecanismo de solución de controversias, pactado y establecido por los tres países en el capítulo 31 para solucionar cualquier asunto que pueda afectar los intereses de los socios y por ende el funcionamiento del tratado y que dota de certidumbre al comercio, los negocios y la inversión en la región.
La Comisión Especial estimó que la solicitud de consultas de Estados Unidos y Canadá, es una oportunidad para refrendar la buena disposición que México siempre ha mostrado de escuchar y dialogar con sus socios estratégicos mientras cuida que prevalezca el interés nacional.
Este grupo de trabajo expresó su respaldo a que predomine el diálogo constructivo entre las partes toda vez que un resultado desfavorable contra nuestro país, afectaría la economía y el bienestar de miles de familias de los tres países.
En ese sentido, México enfrentará una negociación compleja, que demandará un diálogo político de altura, que respete al Estado de derecho, la Constitución y leyes mexicanas y el derecho internacional y los compromisos contraídos en el tratado.
De igual manera, la Comisión Especial reiteró su compromiso de actuar como un espacio donde impere el respeto, el diálogo y la sinergia entre distintos actores e instituciones, tanto públicas como privadas e hizo votos para que la pronta resolución de las consultas permita que México se siga posicionando como un socio confiable y referente productivo y competitivo a nivel mundial.
