La presidenta Claudia Sheinbaum se pronunció este martes sobre la polémica generada por la conducta del diputado de Morena y exgobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, conocido en redes como “Lord Pádel”, durante la sesión de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de San Lázaro.
Al ser cuestionada sobre la situación, Sheinbaum señaló que, aunque Blanco pertenece al partido del que proviene, el gobierno que encabeza se rige por principios de equidad y prioriza “el bien de todos, primero los pobres”.
Agregó que no consideraba necesario comentar sobre la conducta del legislador y que cada persona debía formar su propia opinión.
“Pues no es necesario estar comentando sobre eso, que cada quien tome su opinión”, dijo.
Sobre la posibilidad de mantener sesiones semipresenciales en la Cámara de Diputados, la mandataria aclaró que corresponde al órgano legislativo determinar sanciones y reglamentos internos para los diputados que no cumplan con su asistencia o participación.
“Que tome la Cámara de Diputados sus sanciones a los diputados, que no es algo en lo que yo tenga que estar opinando”, dijo Sheinbaum.
El incidente ocurrió en medio de la votación sobre el impacto presupuestal de la iniciativa de la presidenta Sheinbaum en la Ley de Aguas Nacionales.
Según testigos, Blanco permanecía jugando pádel mientras se desarrollaba la sesión, y pidió que le contaran su asistencia, encendiendo su cámara y micrófono casi al final de la reunión.
Visiblemente agitado y sudoroso, no respondió cuando la presidenta de la comisión, Merilyn Gómez, le preguntó dos veces sobre el sentido de su voto.
El comportamiento de Blanco provocó reacciones entre otros legisladores.
Mario Zamora, del PRI, acusó que el diputado “no sabe ni qué está votando” mientras se escuchaban los golpes de la raqueta.
Margarita Zavala, del PAN, se mostró divertida por la situación, mientras Patricia Jiménez, también panista, criticó de manera seria al exgobernador por supuestamente acosar mujeres durante el incidente.
Este hecho ha generado un debate sobre la eficacia de las sesiones semipresenciales y el cumplimiento de responsabilidades legislativas, mientras la presidenta Sheinbaum mantiene su postura de no intervenir en sanciones internas de la Cámara.
