Por Luis Sunderland Méndez….
Una vez más Sheinbaum nos dio muestra de su capacidad de poner cara de jugador de póker, no hay duda de que es una mujer con un gran talante, con nervios de acero y facilidad para esconder sus emociones y sentimientos.
Así tiene que ser, ella está en un triple juego que la obliga a cuidar que sus expresiones no la delaten, al no controlar su estado de ánimo.
Tiene que quedar bien con Trump, con López y su gavilla de seguidores y además, con los medios de comunicación opositores, no vaya a perder la compostura, y por eso tiene que aparentar que todo está bajo control, lo que no es del todo real.
El miércoles pasado, la presencia de Marco Rubio, el verdadero padre de la estrategia anti cárteles, fue un trago amargo que tuvo que soportar la presidente.
Entre otras cosas, el señor Rubio pretende impedir la inminente intentona de enterrar la democracia y llevar a México a los años 60.
El Secretario de Estado estadounidense no vino a una visita de cortesía, y aunque es un individuo que sabe bastante de formas y que también controla sus expresiones profesionalmente, es claro que no vino a perder el tiempo y lo lógico es que les leyó a los que estaban sentados en la mesa en Palacio, incluyendo a Sheinbaum, las nuevas reglas del juego. La reunión fue cordial y educada, pero no nos perdamos, en el fondo se odian y ambos quisieran lo peor para el otro.
El acuerdo del que ambos cancilleres hablaron en la conferencia de prensa llevada a cabo en la cancillería mexicana, y que después Sheinbaum lo mencionó, definiéndolo como solo una conversación y no como un documento firmado, es muy sintomático.
Esto puede decir mucho del contenido de la reunión, ya que el acuerdo de cooperación bilateral del que se habló, le debe haber dejado muy claro a Sheinbaum que Donald Trump tiene planeado llegar lejos en sus intenciones de aniquilar a los cárteles mexicanos, y a todos los políticos que se han beneficiado de esa asociación perniciosa que los encumbró, a cambio de dejarlos operar libremente.
Todo esto ya está previamente pactado entre dos de los grandes dirigentes mundiales que recién se reunieron en Alaska y que dejó en claro que el continente americano será dominado, tarde o temprano, de una manera o de otra por Estados Unidos. Eso nos coloca en el bando estadounidense, que ojalá sea el debido, porque no ver el desarrollo de China es innegable.
El día 1 Sheinbaum dio su primer mensaje ante sus colaboradores, que más pareció el séptimo de López. Por cierto, les devolvió la cachetada a varios que le hicieron el desaire en el Zócalo. Solo mostró que en lo que va de su primer año de administración, se ha cuidado de López y ha tenido que hacer caso a Trump.
Pero ella está inmersa en: concretar la destrucción del Poder Judicial y lograr la aprobación de la reforma electoral; la 4t llegó para quedarse, y quién sabe por cuánto tiempo. La amenaza a los que señalamos sus ilegalidades, que son insostenibles, nos pone en peligro: podríamos ser obligados a callar, si es que no queremos enfrentar una demanda o una sentencia.
Seamos responsables con la realidad. Nunca olvidemos que Sheinbaum llegó al poder gracias al financiamiento del crimen organizado, que el INE y el TRIFE le regalaron 14 millones de votos de la oposición; también, que desde el inicio de la 4t, el gobierno está coludido con el narco y además, también ha desfalcado las arcas, ahí está el tema Segalmex; y un coordinador de la bancada de Morena en el Senado, está coludido con la Barredora. Amigos lectores, reaccionemos ya, interesémonos en el futuro de México.
