Select your Top Menu from wp menus
23 de agosto de 2025 11:35 am
Diálogo en Bucareli: ¿volverá la política?

Diálogo en Bucareli: ¿volverá la política?

Compartir

De la secretaria de Gobernación (Segob), Rosa Icela Rodríguez, se dice mucho: que será candidata a la gubernatura de San Luis Potosí, que es muy cercana al expresidente Andrés Manuel López Obrador y que es una política dura.

Exsecretaria de Gobierno de la CDMX durante la primera parte de la gestión capitalina de la  ahora presidenta Claudia Sheinbaum, la periodista de origen fue titular de la Secretaría de Seguridad en el segundo tramo del sexenio anterior.

Por su oficio y larga militancia partidista, en el PRD y como fundadora de Morena, Rosa Icela Rodríguez sabe de las reglas formales y no escritas de la política, y es evidente que la disfruta y ejerce.

Con esos antecedentes debemos valorar la declaración de la presidenta Sheinbaum de que no prevé cambios en su gabinete y la reunión en Bucareli de su titular con los coordinadores de los diputados.

A invitación de la secretaria, este jueves asistieron a sus oficinas los jefes de los grupos parlamentarios de Morena, Ricardo Monreal; PAN, José Elías Lixa; PVEM, Carlos Puente; PRI, Rubén Moreira; PT, Reginaldo Sandoval, y Movimiento Ciudadano, Ivonne Ortega.

Guardando las formas del caso, la funcionaria pidió al líder de la mayoría y presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), el diputado Monreal, convocar a sus pares para este diálogo privado.

En un evidente gesto de apapacho y protección, fue incluido en el grupo el presidente de la Mesa Directiva de San Lázaro, Sergio Gutiérrez Luna, quien este 1 de septiembre concluirá ese encargo.

En la normalidad del viejo régimen estos encuentros con el interlocutor gubernamental con los partidos políticos y la oposición fueron rutinarios.

Pero en el sexenio anterior ese diálogo fue regateado por el presidente López Obrador y, a partir de 2021, satanizado como un espacio innecesario, al grado que dejó de invitar a los presidentes del Congreso y del Poder Judicial a los actos republicanos, como el Grito del 15 de septiembre y el desfile del día siguiente.

Olga Sánchez Cordero guardaba las buenas formas con la oposición, pero no era interlocutora de éstos ni de los otros Poderes. Con el secretario Adán Augusto López Hernández volvieron las atribuciones del cabildeo a Segob, aunque a discreción. Así, por ejemplo, negoció con Alejandro Moreno, presidente del PRI, ampliar la permanencia militar en la estrategia de seguridad.

Y si bien la secretaria Rodríguez ha visitado a diputados y senadores, ésta es la primera vez que funge de anfitriona y mensajera de Palacio Nacional.

De inicio, les dijo que la presidenta Sheinbaum será respetuosa de las designaciones que los diputados hagan en la Mesas Directivas de la Cámara.

Se trata de una noticia que pone freno a los radicales de Morena que pretendían romper el acuerdo de Ricardo Monreal con sus pares de la Jucopo de que esa responsabilidad corresponde al PAN en este segundo año, un hecho que perfila a la actual vicepresidenta Kenia López Rabadán en la tarea de conducir la asamblea de los 500 diputados.

También les comentó la secretaria Rodríguez que la prioridad legislativa es concretar la reforma constitucional y secundaria contra la extorsión, un cambio respaldado por todas las bancadas y que le daría al secretario Omar García Harfuch los instrumentos jurídicos para desmontar el cobro de derecho de piso que tanta fortalece a las organizaciones criminales.

Y en su calidad de integrante de la Comisión Especial del gobierno para la reforma electoral, la funcionaria les garantizó a los parlamentarios que en ésta todavía no hay nada escrito y que el Congreso será escuchado. Hubo quejas de los aliados de Morena porque el secretario García Harfuch, dicen, no atiende sus preocupaciones. Y bromas de la oposición de que ojalá la secretaria Rodríguez no llegue a regañarlos el próximo 1° de septiembre, en la entrega del Primer Informe de Gobierno, como lo hizo su antecesora en 2024, Luisa María Alcalde, que convirtió el acto protocolario en un mitin.

Para algunos fue una simple visita de cortesía. Otros esperan que sea el inicio del indispensable diálogo plural entre Poderes que toda nación democrática necesita.

Nadie, sin embargo, se llama a engaño: en el régimen morenista los márgenes de decisión de los secretarios son escasos frente “a las definiciones del movimiento”.

Así sucedió cuando el presidente López Obrador rompió el diálogo con la Suprema Corte de Justicia de la Nación, alegando un acuerdo opaco que según él propuso la ministra Norma Piña a la secretaria Rosa Icela, quien días atrás había desayunado con la presidenta del Poder Judicial.

La entonces titular de Seguridad pidió disculpas en privado por lo sucedido. Pero públicamente todo quedó igual.

¿Tendrá en su actual encomienda mejores márgenes de acción la política que despacha en Bucareli?

Durante las efemérides patrias tendremos una primera respuesta, si la presidenta Sheinbaum invita a la presidenta de la Cámara de Diputados a los eventos republicanos, y si ese cargo recae finalmente en una panista.

Related posts