Por: Fernando Moctezuma Ojeda – @FerMoctezumaO
Falta menos de una semana para el 1° de junio, día de la elección judicial, y en las últimas semanas, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) ha intensificado sus protestas en diversos puntos del país, en particular en la Ciudad de México, donde su plantón en el Zócalo y la toma de accesos del Aeropuerto Internacional Benito Juárez han trastocado la vida cotidiana y la movilidad de la ciudadanía. Aunque el gobierno federal ha reiterado su disposición al diálogo a través de las Secretarías de Gobernación y Educación Pública, la mandataria descartó un encuentro privado con la dirigencia sindical y señaló que “hay cosas que no están bien” en la forma en que se han conducido estas movilizaciones.
El contexto adquiere un matiz más delicado debido a la inminencia de las elecciones del próximo domingo. La CNTE parece haber encontrado en la coyuntura electoral una oportunidad para presionar al gobierno federal y obtener mayores concesiones, más allá del incremento salarial del 10% planteado por la administración. La posibilidad de que las protestas de la CNTE busquen asfixiar, condicionar, o influir en las decisiones de la presidencia en un momento de alta tensión política representa un riesgo institucional que no debe pasarse por alto.
Si bien el derecho a la protesta y la libertad de expresión son derechos fundamentales consagrados en la Constitución, la manera en que estas protestas se están ejerciendo plantea un precedente peligroso. En caso de que el gobierno federal ceda ante las demandas de la CNTE sin condiciones claras o contrapartes verificables, se estaría enviando un mensaje preocupante a otros sectores estratégicos del Estado: la presión pública y el chantaje en momentos electorales pueden derivar en beneficios o concesiones inmediatas.
Este precedente tendría implicaciones profundas. Hoy es la CNTE, pero mañana podrían ser policías, personal médico o incluso fuerzas armadas quienes recurran a prácticas similares en busca de mejorar sus condiciones laborales o presupuestales. Las autoridades federales enfrentan así la responsabilidad de sostener un marco de diálogo abierto y respetuoso, sin permitir que la coyuntura electoral se convierta en un escenario de concesiones improvisadas o de decisiones tomadas bajo presión.
La presidenta Sheinbaum ha reiterado que “los maestros y las maestras se merecen todo”, reconociendo la importancia y dignidad de su labor. No obstante, también subrayó que existen limitaciones presupuestales que no pueden ignorarse. La clave estará en garantizar que la negociación avance sin imposiciones ni chantajes, y que los acuerdos se ciñan a las capacidades reales del Estado y no a la urgencia política de evitar un conflicto electoral.
En última instancia, lo que está en juego no es sólo el resultado de las negociaciones con la CNTE, sino la integridad de la relación entre el gobierno y los sindicatos, así como la legitimidad misma de la protesta social en un Estado de derecho. Normalizar el uso de la presión electoral como herramienta de negociación sería un error que podría hipotecar la gobernabilidad a largo plazo y debilitar el equilibrio democrático del país.
APUNTES CLAVE:
MODALIDAD 40: Los trámites para acceder a la Modalidad 40 del IMSS, que antes tomaban cuatro meses, ahora pueden demorar hasta un año debido a la centralización de la validación de semanas cotizadas. Esto afecta directamente a las personas que esperan el pago oportuno de su pensión. Usuarios han reportado que la baja en la Modalidad 40 y la certificación de cotizaciones pueden demorar hasta tres meses, a pesar de que los lineamientos internos del instituto establecen un plazo máximo de 12 días hábiles. La acumulación de expedientes y la falta de un plan concreto para resolver los retrasos han generado preocupación entre los asegurados. //CFE: El diputado federal Erubiel Alonso Que, vicecoordinador del PRI en la Cámara de Diputados, exigió al gobierno de Tabasco intervenir ante la CFE para resolver los constantes cortes de energía en Villahermosa y otros municipios. Señaló que, pese a los cortes, los recibos de luz llegan con tarifas elevadas, lo que afecta a las familias durante la temporada de altas temperaturas. La CFE y el gobierno estatal no han respondido oficialmente a esta denuncia.
