Por José Antonio Chávez
Cuando era Presidente López Obrador, difícilmente las criticas le movían el tapete, se mostraba con su sonrisa y las atajaba con su piel gruesa.
Sin embargo, cuando por primera vez, le llamaron a su delfín, Claudia Sheinbaum narco-candidata, explotó en colera y, por primera vez la piel se sintió muy delgada.
Fue la frase que se viralizaba en las, como les llama, benditas redes, “narco-candidata” y punto.
La adversaria que encabezaba la candidatura Presidencial de la oposición, Xóchitl Gálvez le atizó a Sheinbaum en el debate con esa frase.
Fue la respuesta por las acusaciones y señalamientos que Sheinbaum le gritaba a Xóchitl de corrupta. Y le reviraba que ella era, entonces la narco-candidata.
En Morena y en Palacio Nacional se desdibujaba la carrera Presidencial, sabían que esa frase les afectaba, no solo en el plano nacional, sino a nivel internacional.
Se movieron para acordar bajar, esa frase, de las redes mediante cabildeos con la misma oposición o con la misma candidata.
Si bien López Obrador aguantaba, al menos eso manifestaba en público, que no se doblaba por duras que fueran las críticas, con la frase de narcos, ahí si se dobló.
Fue el propio líder de los priistas, Alejandro Moreno “Alito” el que denunció que en las campañas lo candidatos de Morena recibían recursos de la delincuencia. Que era un narco-Estado. Que mantenían amenazados a los ciudadanos en elecciones y sembraron la zona de terror.
El sábado, con la entrada de aranceles que aplicó el Presidente de Estados Unidos, Donald Trump a México, fue como consecuencia de una penalidad por permitir el gobierno mexicano la entrada de fentanilo para ese país vecino.
Trump acusó que el gobierno de México está involucrado con los cárteles por eso es la facilidad de traficar el fentanilo.
Desde luego que esa acusación retumbó en Palacio Nacional que obligaron a los 24 gobernadores de Morena salir a defender a la Presidenta.
También la orden fue para los senadores y diputados, sus coordinadores Adán Augusto y Ricardo Monreal levantar el respaldo a Sheinbaum, mientras que los presidente de ambas cámaras, Gerardo Fernández Noroña y Sergio Gutiérrez fueron llamado hacer lo propio, defender con todo y respaldar a Sheinbaum.
Basta recordar que la detención en EU de Ismael “El Mayo” Zambada ha ofrecido información de primero nivel al gobierno estadounidense, ¿que tanto le diría del gobierno de López Obrador y del partido Morena?
Trump tiene muy claro cuando López Obrador saludó, públicamente en Sinaloa a la mamá del Chapo Guzmán. Un acto que se viralizó.
También tiene muy claro cómo se mueven los cárteles en Sinaloa con la complicidad gubernamental y que pone en la línea más frágil de cárcel, al gobernador Rubén Rocha.
Que decir de las acusaciones contra el gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, pues en campaña los panistas de Marko Cortés denunciaron que recibía dinero de los cárteles que encabezaba el empresario Carmona.
Le puedo adelantar que las presiones al gobierno de Sheinbaum, deja insostenible la permanencia del gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha que puede caer en el plazo de 30 días que dio Trump a México de frenar los aranceles. También se ubica, de reojo al gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal.
Suspender Estados Unidos 30 días los aranceles a México, no es regalado, puede apostar que, como el Plan Mérida para ser certificados y recibir recursos, misteriosamente el gobierno comenzará a dar importantes decomisos contra el narco y porque no hasta la detención de peces gordos, tanto de cárteles como la caída, incluso de gobernadores, Sinaloa y Tamaulipas.
