Por Silvia Montes..
ZACATECAS tiene urgencia porque termine este sexenio. Cuando hablamos de que David cursa ya su cuarto año al frente del Poder Ejecutivo vemos más cerca el anhelado momento mientras los aspirantes van perfilándose, especialmente en el caso de los hombres.
VIVE la población un desgano general en medio de la desesperación por tantas necesidades sin resolver mientras continúa el desacuerdo mayoritario por la construcción del viaducto elevado junto con la muy prematura sucesión gubernamental.
UN PROCESO tan anticipado se manifiesta de una manera inédita porque los aspirantes a la candidatura del partido en el poder se desplazan por toda la entidad como lo hace el diputado federal Ulises Mejía que tiene a su favor la cercanía con Claudia Sheinbaum.
ADELANTADO como nunca antes, el proselitismo tiene cuestiones positivas y la mejor es la cercanía con la gente. Ulises ha establecido esta dinámica desde que operó con eficiencia la proyección de la figura de la hoy Presidenta de la República.
PARA él no es ninguna novedad visitar las distintas regiones donde sigue informando las actividades del llamado “segundo piso de la transformación”, las decisiones legislativas que ha respaldado y llevando además, ferias de la salud que impactan positivamente.
SUCEDER a David es la meta y la operación política llevada con las características que Mejía le imprime plantea una estrategia absolutamente viable y lo hemos visto en las mediciones que ya se han realizado colocándolo en primer lugar de las preferencias.
A DAVID seguramente le molesta el activismo de quien ha sido rechazad por él y los suyos, que sin embargo es muy bien tratado por Ricardo en la cámara baja donde coinciden. El doctor no es tonto y sabe del potencial de Ulises desde cualquier punto de vista.
DESTACANDO como un político serio, sobrio y carismático, Mejía va con la bandera del escudo de armas de Zacatecas: “El Trabajo todo lo Vence” y va también con la oferta de la esperanza de un futuro mejor para esta tierra nuestra tan injustamente castigada.
POLÍTICOS con disposición al trabajo, preparados, y con deseo genuino de servir nos urgen. Estamos hartos de ocurrencias como la más reciente del llamado “gobernador” que describió a Zacatecas como un “pueblito bonito”, que debe transformarse en ciudad con un segundo piso de tres kilómetros de extensión.
COMO ULISES lo está haciendo es un buen manejo porque traza la ruta hacia el 2027 jugando limpio y dispuesto a hacer equipo por el bien de los zacatecanos. Me lo ha dicho y me parece honroso y honorable pensar así, sobre todo refiriéndose a aspirantes como él.
EN EL ESTADO donde se decretan años de paz, bienestar y luego seguramente progreso, siguen existiendo retos enormes que demandan perfiles con sensibilidad y cultura capaces de conducirse con decoro sin exhibir ignorancia y soberbia como lo vemos ahora.
