Por José Antonio Chávez
El líder de los panistas, Marko Cortés clasificó a Miguel Angel Yunes como un senador tránsfuga y traidor y que su voto va estar sometido e Morena durante seis años poque la impunidad no la pagas una sola vez.
En la reforma Energética de corte constitucional que Morena y aliados necesitaban los dos tercios, nuevamente se vio el voto del todavía panista en proceso de expulsión, Miguel Angel Yunes. Marko señaló que va a tener que estar plenamente sometido, tristemente al régimen morenista.
Yunes acabó con la esperanza de la oposición de evitar que se aprobaran esas reformas Constitucionales que, a su juicio de ese bloque son dañinas para el país.
Anote la reforma al Poder Judicial que terminó de un plumazo con la carrera de trabajadores de ese poder que se preparaban para concursar por una plaza de jueces. Ahora, con estas nuevas reglas, cualquier abogado que no se haya formado en el Poder Judicial para alcanzar esos cargos, lo podrá hacer mediante las elecciones del pueblo.
Entonces, ahora el pueblo decidirá, aunque no sepa ni quienes serán los candidatos, con el poder de su voto para los nuevos jueces en las elecciones armadas en la primera semana de junio del 2025 y la otra parte en el 2027.
Todas las familias, de jueces, magistrados y ministros, le deben su fracaso de salir de facto al propio Yunes que traicionó a sus ciudadanos que le dieron su voto de confianza en contra del oficialismo.
Ahora está con ellos y el trato, se marcó en lo acuerdos con el líder del Senado, Adán Augusto su voto por todo el sexenio a cambio de blanquear sus expedientes que son sujetos a cárcel.
Vaya, un intercambio de total impunidad, pero sujeto a ser el voto traicionero todo el sexenio, para aprobar todas las reformas que les manden, sobre todo de la Presidenta Claudia Sheinbaum.
Hoy las reformas que se están aprobando, son del saliente, López Obrador en una clara represalia, en la reforma Judicial, contra los 8 ministros que encabeza su presidenta, Norma Piña que frenaron la llegada de su candidata a ese máximo cargo, Yasmín Esquivel.
El voto de Yunes ha sido el más importante que se haya registrado en la historia del Poder Legislativo, pues le vino a dar los 86 votos a Morena y aliados para alcanzar los dos tercios para cerrar la pinza con el líder de la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal que goza de una bancada con la mayoría calificada de sobra.
Basta recordar que Morena llegó, con sus aliados con una cifra de 83 votos al Senado con su actual presidente Gerardo Fernández Noroña.
En el registro de bancadas, Adán Augusto logró convencer, de la manera que se pueda todo mundo imaginar a los dos senadores del PRD, Araceli Saucedo y José Sabino Herrera.
Con ellos, registró 85 escaños y en la primera reforma Constitucional del Poder Judicial, logró, también convencer el otro voto que le faltaba, el del panista veracruzano, Miguel Angel Yunes.
Don Adán para asegurar los 86 votos que le daban la mayoría calificada y aprobar firme la reforma al Poder Judicial, también, de forma paralela logró la ausencia del senador Daniel Barreda de Movimiento Ciudadano en la hora de la votación.
Aunque les vio, sin duda la cara o incluso hubo complicidad de sus pares del partido naranja, el argumento para justificar porque no llegó a votar, simplemente fue de telenovela.
La sospecha de complicidad es porque ayer, pasó lo mismo con Luis Donaldo Colosio que se ausentó todo el día, para la reforma Energética y terminó, después de la votación solicitar licencia.
Y qué decir de la ex gobernadora de Zacatecas, Amalia García que se abstuvo en esa votación de corte Constitucional, por eso de los 42 votos opositores del PRI, PAN y MC, solo alcanzaron 39 con la ausencia de la panista por Quintana Roo, Mayuli Martínez que participó en la reforma de Ferrocarriles por la mañana y por la noche, en la Energética ausente porque se declaró enferma. Igual que su compañera, ausente, Gina Campuzano.
Los 15 del PRI, todos votaron en contra, la pregunta, entonces es, sobre los ausentes y sus historias, ¿a quién creerle que no hay complicidad?
