DE: Seguridad

Por Alejandro Villegas..
La ciudadana presidenta, de nueva cuenta, reafirma su sometimiento al no variar ni el discurso ni la estrategia en materia de seguridad.
Confirma que no habrá guerra contra el narcotráfico y enfoca fiel, a la línea discursiva que le fue dictada por el machuchón mayor, el discurso en el ciudadano Felipe Calderón Hinojosa.
De ahí en fuera no hay novedad alguna, más allá de la creación de una subsecretaría más.
Los cuatro pretendidos ejes, son solo la extensión literal y sin modificaciones sustanciales de la ruta trazada.
Es claro que su estrategia, se basa en continuismo cuando es claro que las acciones realizadas no han rendido los resultados que espera la sociedad.
Por otra parte, la identificación de seis entidades como las que presentan una mayor problemática, por lo que se supone recibirán atención prioritaria, tampoco se traduce en algo novedoso.
Lo que realmente llama la atención es el nivel protagónico que se trata de otorgar a ciudadano secretario de Seguridad Ciudadano.
Fuera de ahí, no hay novedad en el rubro de seguridad.
Armonización
La evidente falla que representa el hecho de que, en el marco de la aprobación de la reforma judicial, no se hayan armonizado dos artículos de la Constitución relativos al proceso para la designación de ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, no solo exhibe el desconocimiento y las prisas, sino también los riesgos que asumió el ala legislativa de la 4T, al plegarse a la instrucción de aprobar todo sin cambiarle ni una coma.
Ahora viene la tarea de recomponer la situación, pero eso si cumplieron la indicación recibida.