En una mañanera de evangelio, el presidente López Obrador se prepara para Semana Santa lamentando que los conservadores no estén hincados y pidiendo perdón al pueblo luego de haber tratado de privatizar lo que le corresponde a la nación “viven en el pecado social.”
En cambio, anunció que gracias a su política de austeridad republicana se pudieron comprar 13 plantas de energía que eran propiedad de Iberdrola y con esto se garantiza que no suba el precio de la luz y se fortalezca la CFE, “yo me comprometí a que no iban a subir los precios de la luz, el gas, la gasolina, el diésel, y estoy cumpliendo, incluso han habido reducciones, pero con esto ya garantizamos que el tiempo que nos falta no habrá aumentos, y también hacia adelante, vamos a concluir nosotros y vamos a dejar condiciones para que se mantenga la misma política de precios en los energéticos, y aquí vamos al fondo del asunto, desde que llegamos, estamos invirtiendo en las refinerías, ya compramos una, construimos una, estamos formando dos coquizadoras…Hasta el día de ayer la CFE tenía una participación del 39% y con esta adquisición pasó a 55%…”
Defendió a Donald Trump luego de las acusaciones en su contra realizadas por la Corte en Estados Unidos, “refrendo, mantengo mi postura de que no debe utilizarse lo jurídico, los asuntos supuestamente legales con propósitos políticos electorales, por eso no estoy de acuerdo con lo que le están haciendo al expresidente Trump. Que no quieran descalificar a nadie en ninguna parte del mundo. Miren lo que le hicieron a Pedro Castillo en el Perú. Que sea el pueblo el que decida y no hay que tenerle miedo al pueblo. Me llama la atención que lo están acusando de algo del 2000 o 2006. Aquí querían quitar de presidente municipal de Cuernavaca a Cuauhtémoc Blanco. Es una degradación de la seriedad que deben de tener las leyes, el respeto que deben de tener. No fabricar delitos…”
