Por Ricardo Burgos Orozco
Hace un mes se cerraron 12 de las 20 estaciones que integran la Línea 1 del Metro para — por fin — darle el primer mantenimiento a fondo desde que se inauguró en 1969. Las estaciones que estarán sin servicio hasta marzo del año próximo son: Pantitlán, Zaragoza, Gómez Farías, Boulevard Puerto Aéreo, Balbuena, Moctezuma, San Lázaro, Candelaria, Merced, Pino Suárez, Isabel la Católica y Santo del Agua.
Aunque han sido insuficientes los autobuses que implementó el gobierno de la ciudad para la atención temporal de los usuarios, no ha quedado otra más que aguantar porque a final de cuentas será para bien de todos, la modernización que se está llevando a cabo. Recordemos que esta línea transporta diario 500 mil personas y conecta con otras nueve terminales.
Ya sabemos que después de marzo hasta agosto de 2023 vendrá la segunda etapa de la rehabilitación con el cierre de las estaciones: Balderas, Cuauhtémoc, Insurgentes, Sevilla, Chapultepec, Juanacatlán, Tacubaya y Observatorio.
Se supone que durante todo ese tiempo, se sustituirán los 19 kilómetros de vía, se modernizarán zonas de talleres y maniobras en Zaragoza, se cambiarán los sistema eléctricos, electrónicos, de alimentación de alta tensión y subestaciones de rectificación. Sustituirán el sistema obsoleto de control y se comprarán a una empresa china 29 nuevos trenes.
Con todo ese trabajo, dicen, se reducirá el tiempo de recorrido de 45 a 30 minutos, pasará un tren cada minuto y medio, habrá 36 trenes por hora, se incrementará la capacidad de transporte en 36 por ciento y no habrá retrasos por avería puesto que todo va a ser nuevo.
Muy bueno hasta aquí, pero hasta ahora nadie ha explicado que va a pasar con los miles de establecimientos que se encuentran dentro de las instalaciones de la Línea 1 del Metro. En primer lugar, hay una total opacidad para saber el número de negocios registrados que pagan rentas de millones de pesos para ocupar un espacio y que ahora tuvieron que cerrar. Los directivos del Sistema de Transporte Colectivo no han informado si les van a condonar los pagos mientras no vendan.
El problema es que los comercios en el Metro vienen de unos meses muy malos desde marzo de 2020 con la pandemia y para colmo les anuncian que durante ocho meses van a cerrar 12 estaciones y otras ocho por seis meses más. Es un número muy alto de familias que dependen de la comercialización de sus productos en las instalaciones del Metro.
En internet no hay alguna información con respecto a la estrategia o plan que se está siguiendo con los establecimientos de la Línea 1; tampoco el portal tiene datos sobre el tema. Sólo encontré en una página acerca de los requisitos para rentar un local comercial en el Metro.
Los directivos del Metro deberían dar a conocer detalles sobre al apoyo a los establecimientos establecidos mientras están cerradas las estaciones de la Línea 1. Otra alternativa para mí sería solicitar información directamente, pero les confieso que hace dos años pedí una cita con el jefe de prensa y hasta ahora no me han respondido.
