Por Alejandro Villegas…
El ciudadano presidente exige que quienes acusan a su hijo José Ramón de irregularidades presenten pruebas de las presuntas irregularidades.
Y tiene razón, porque en México debe privar el Estado de Derecho. Nadie por encima de la ley, ni nadie al margen de la misma.
Para su desgracia, la exigencia ante la próxima edición de un libro sobre la “Casa Gris”, contrasta de manera adversa con los constantes señalamientos que realiza desde el púlpito mañanero en contra de quienes considera sus adversarios, sin esgrimir más prueba que su palabra.
Y lo que es peor, sin promover de manera directa un proceso legal, en contra de quienes denuncia.
Es claro que no es lo mismo lanzar acusaciones que encontrarse como afectado, aunque sea de manera colateral, por alguna.
El efecto de la eventual publicación que hoy le preocupa, sin duda no es apreciada con el mismo rasero que se utilizó con el libro sobre la Casa Blanca, que en su momento alcanzó un amplio reconocimiento entre la oposición, como resultado de un ejercicio periodístico de investigación.
En paralelo, el ciudadano presidente se lanza contra los profesionales del periodismo que considera como parte de sus adversarios, al advertir “si no prueban nada, es aplicar la máxima del hampa de la política y el periodismo”.
No hay duda, no es lo mismo ser oposición que gobierno. Quizá el ambiente de Palacio Nacional influye y hace más delicada la piel de sus residentes.
Aspiraciones.
Respalda por las expresiones de reconocimiento que ha vertido el ciudadano presidente, en torno a su figura política, la ciudadana Claudia Sheinbaum asegura que está preparada para dar continuidad a la 4T.
Advierte que es el tiempo de las mujeres, y ante ello, es claro que aspira a convertirse en la candidata de Morena a la presidencia en 2024.
Obvio, no quiere salirse del guion y compromiso trazados. La ciudadana Jefa de Gobierno sabe bien que necesita del aval del ciudadano presidente, para ser ungida como su eventual sucesora y por tanto heredera tanto de su legado como de su programa, y por supuesto de la 4T, con todo lo que ello implica.
