¡Arboles! ¿Conocerán vuestras raíces toscas mi corazón en tierra?
Federico García Lorca
CULTURA IMPAR
José Manuel Rueda Smithers
El Tren Maya va, sentenció con su dedo el presidente. Una nota que no debe perderse hacia la agenda 2030. ¿Qué está pasando verdaderamente con la construcción cumbre de la 4t, el Tren Maya?
Por un lado, los jueces determinan una y otra vez el freno total de las obras. Por el otro, el gobierno mexicano -propiamente quien lo dirige- se emberrincha por no detener nada, y derribar lo que se oponga a su paso.
“No estamos dimensionando lo que el ECOCIDIO del #TrenMaya implica”, señala el MSc Medio ambiente y Desarrollo Sustentable, Pablo Montaño. “Sus impactos ya son de una escala de terror y todavía no pasa el primer vagón; falta el desborde del turismo, más especulación, más despojo, más narco, más violencia…”.
El lado oscuro del quehacer mexicano.
A pesar de que el gobierno dice regirse por la austeridad, el tema de la Agenda 2030 no es una prioridad. Todos los días sale información sobre el sureste mexicano en lo que ya se nombra como otro ecocidio mundial en América, después del Amazonas.
La obra más importante para la 4t, es la construcción del Tren Maya, que bajita la mano ha derribado más de 100 mil árboles sin que se sepa a ciencia cierta a dónde fue llevada esa madera (fina, por supuesto) para su industrialización, y qué se hará para reponer lo podado.
El sr que despacha las mañaneras desde Palacio Nacional, ha prometido, una y otra vez, desde el inicio del megaproyecto del Tren Maya que éste sería ecológico y no se derribaría ningún árbol para su construcción. Sin embargo, Mexicanos Contra la Corrupción (MCC), reveló que para abrir el tramo 5 del Tren Maya, que va desde Cancún a Tulum, se removieron más de 20 mil árboles. ¿Lo peor? Ya cambió la ruta. Tirarán más.
El enlace ambiental de Fonatur en la zona, Pablo Rubio, en septiembre de 2021 dijo que varios árboles se llevaron al Jardín Botánico “Alfredo Barrera Marín”, en Puerto Morelos, para su preservación.
Sin embargo, trabajadores del Jardín Botánico comentan a los medios, que ninguno fue llevado a ese lugar desde que se inició el proyecto del Tren Maya. Es más, mencionan que el espacio en donde se pondrían las mencionadas especies arbóreas, es muy limitado y “no tiene cupo para más de 100 árboles de tamaño mediano, pues esa pequeña área está pensada para resguardar plantas y árboles pequeños”.
MCC señala que de los árboles que sí se conoce el paradero, se encuentran ubicados en la Av. Bonampak, al lado de una ciclopista, en Cancún, aunque las autoridades han dejado esta zona y se nota la evidente falta de riego.
Apoyado en la redes sociales para difundir diversos videos, Pablo Montaño sigue y denuncia los avances del tramo 5 del Tren Maya, que abarca cerca de 16 kilómetros al centro de Playa del Carmen, razón por la que se estaría realizando la tala masiva de gran parte de la selva en Quintana Roo.
Dicen que además no solo se están cortando pulmones naturales, sino que la construcción se encuentra sobre cuevas que irían directo al manto acuífero, contaminando el agua de los cenotes.
El gobierno federal rechaza estas versiones, pero no emite pruebas de lo contrario. No es un hecho inocente el que la SEDENA -el ejército mexicano- sea quien ahora esté a cargo de toda la obra del Tren Maya.
¿Quién se atreve a detenerlos?
