El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, se refirió al conflicto con Ucrania, durante una entrevista otorgada este viernes a algunos medios locales, donde entre varias cosas, afirmó que “si depende de Rusia no habrá guerra”.
El canciller añadió que “no queremos guerras. Pero tampoco permitiremos que se ignoren y se pisoteen groseramente nuestros intereses”, ya que según él, EEUU ha dado respuestas “bastante confusas” respecto a las garantías de seguridad que ha estado pidiendo Rusia.
En este sentido, lo propuesto por parte de los rusos, para acabar con el conflicto, incluye una serie de solicitudes, como la retirada de la OTAN de la región, el freno a la expansión de alianza que están desarrollando, en especial Georgia y Ucrania, y terminar con la cooperación existente con las antiguas repúblicas soviéticas.
Asimismo, manifiesta que las respuestas por parte de la OTAN y EEUU a estas propuestas, han sido “al estilo occidental, que son turbias”, y destacó que no ve “ninguna posibilidad para el compromiso”, porque no se pueden llegar a acuerdos “si las anteriores decisiones se tergiversan y se sabotean”.
“Si ellos (los estadounidenses) insisten en que no modificarán sus posturas, nosotros tampoco lo haremos”, añadió el canciller.
Además, respecto a las amenazas de castigos o sanciones económicas que han insinuado EEUU o Reino Unido, como la exclusión de importantes sistemas financieros, el ruso dijo que eso “equivaldría a la ruptura de relaciones”.
