En una mañanera de advertencia, el presidente López Obrador da golpe directo al INE anunciando que está evaluando los gastos que realiza el organismo para presentarle formalmente, la próxima semana, un plan de austeridad republicana y así puedan realizar la consulta de revocación de mandato en todo el país, “que se pongan casillas en todos los pueblos, queremos obtener más del 40% de la votación…
” Reveló, con ayuda de una reportera, que el Instituto Electoral gastó el año pasado más de mil mdp en materia de rentas de inmuebles y autos; además, más de 34 mdp en publicidad , también hay pagos millonarios por el uso de tintorería, a organizaciones de la sociedad civil y a traductores.
Manifestó que está pidiendo que se investiguen los salarios de los asesores y los funcionarios, saber si hay caja de ahorros o si tienen seguro de gastos médicos mayores, además, solicitó información de los proveedores de la credencial electoral. “Sabemos que tienen gastos superfluos…”
Por otra parte, presentó su agenda 2022 resaltando que principalmente es seguir dándole atención al pueblo, seguir combatiendo la corrupción, tener medicamentos, seguir con la austeridad, es garantizar la paz y la seguridad y es inaugurar el aeropuerto y la nueva refinería, que se resuelva el pago de Shell…”
Dirigido al legislativo, les anunció que está pendiente la reforma eléctrica, “para corregir la injusticia de que empresas paguen menos de luz que lo que paga una familia en su hogar y garantizar que no aumente el precio… y para que el litio no se privatice…
Vamos a conocer la postura de los legisladores, si están a favor del pueblo o de lado de las empresas…” La segunda reforma es la electoral, “necesitamos una reforma y que haya austeridad, no se puede gastar tanto en el órgano encargado de las elecciones, 20 mil mdp.
